viernes, 31 de mayo de 2013

Videojuegos que nos hicieron soñar

Hoy vamos a echar una nostálgica mirada atrás para recuperar algunas de las memorias que forman parte del imaginario colectivo de todos aquellos que crecimos en aquellos maravillosos (o quizá no tanto) años ochenta. Para empezar, nada mejor que refrescarnos la memoria con algunos de los videojuegos que, en su versión Coin-up o en formato doméstico hicieron las delicias de los niños que una vez fuimos (y algunos, como yo, aún lo somos). Llama la atención la vigencia que estos clásicos siguen teniendo en la actualidad, gracias al auge de los emuladores y las versiones para soportes actuales como las tablets o la PSP.

Barbarian:
Juego de lucha mítico, en la que manejábamos a un bárbaro al más puro estilo marcado por Conan, armado con un hacha, que debía superar uno a uno a todos sus oponentes en combate singular hasta llegar al jefe del final del juego. Lo que más nos llamaba la atención a los niños de aquella época era su espectacular portada, que incluía una señorita mínimamente vestida con un diminuto bikini que era todo un ejemplo de anacronismo y la posibilidad de decapitar a nuestro enemigo con un certero molinete del hacha, tras lo cual salía un eneno a llevarse los restos del finado. El juego tuvo incluso una segunda parte, en la que podíamos manejar también a la chica en una intrincada red de laberintos donde aparecían dinosaurios que, si no llevábamos cuidado, nos arrancaban la cabeza para comérsela.

jueves, 30 de mayo de 2013

"El nombre del viento", la mediocridad convertida en best-seller

Hay novelas que, sin explicarse uno muy bien cómo ni por qué, reciben montones de críticas elogiosas y triunfan en las listas de libros más vendidos. En mi opinión, es el caso de "El nombre del viento", del norteamericano Patrick Rothfuss. Resulta complicado destacar nada de un enorme ladrillo de casi novecientas páginas, en el que una vez que terminas de leerlo (al menos es una lectura fácil, eso sí) te das cuenta de que realmente no ha pasado nada de nada. La historia la hemos leído docenas de veces: un misterioso personaje, encargado de una taberna, rememora su pasado cuando le entra la crisis de los cuarenta. Se sugiere que ha sido un hombre muy importante y que ha realizado hazañas sin par. Ha sido aprendiz de magia al más puro estilo de Harry Potter y otros tantos que vinieron antes. Desde entonces, el lector siempre tiene la sensación de que va a pasar algo de un momento a otro, que nunca termina de llegar. No es que la novela no tenga sus momentos buenos, que los tiene (en novecientas páginas, es de esperar), pero siguen sobrándole unas seiscientas o más.

miércoles, 29 de mayo de 2013

Los cuentos de Frederic Brown

Si Frederic Brown ha pasado a los anales de la historia de la literatura de ciencia-ficción, la mayor parte de la culpa la tienen sus geniales relatos cortos. A pesar de ello, es justo recordar que publicó más de una excelente novela como: "Marciano, vete a casa", en la que narra una invasión marciana de la Tierra que transcurre de forma pacífica. Los problemas que se derivan de la presencia constante de alienígenas observando a los humanos mientras tratan de seguir normalmente con sus vidas resultan tener consecuencias desastrosas para el orden mundial. Precisamente, el sentido del humor inteligente es la nota predominante en la ingente producción literaria de Brown, que en las distancias cortas supo proyectar todo su talento mejor que con narraciones largas. La editorial Gigamesh tiene en su catálogo una excelente recopilación de sus relatos cortos y novelas, que previamente habían aparecido en le mítica colección Nebulae de Edhasa. Brown está considerado el padre del microcuento. De hecho, uno de sus relatos más célebres tiene el honor de ser el cuento de terror más breve de la historia, y dice más o menos así: "El último hombre vivo estaba sentado en la habitación. De repente, llamaron a la puerta". Es difícil construir tanto con tan poco, y si no, que cada uno lo intente para darse cuenta de ello. Huelga decir que hubo un segundo relato que era una suerte de continuación de éste y que seguía con la entrada en la habitación de una mujer.

martes, 28 de mayo de 2013

Dan Simmons, genial en "El Terror"

Dan Simmons es un autor inconformista, eso es algo evidente. Elevado a la categoría de clásico y referente en el mundo de la ciencia-ficción con su archiconocida saga "Los cantos de Hyperion" a principios de los noventa (ya se sabe: Hyperion, La caída de Hyperion, Endymion, El ascenso de Endymion), Simmons no ha dejado de experimentar en géneros tan dispares como el terror o la narrativa histórica. Precisamente, el título que nos ocupa hoy es una mezcla tremendamente acertada de esos dos géneros. Trata sobre una legendaria expedición al ártico que partió de Inglaterra en 1847 con el fin de explorar aquellas latitudes, ignotas por entonces. Los dos barcos de la Armada británica (HMS Erebus y HMS Terror) sufren los rigores del frío y la falta de alimentos hasta que quedan encallados sin posibilidad de rescate mientras se acaban las provisiones y deben tomar una decisión: esperar a que el verano traiga un más que dudoso deshielo o dejar las embarcaciones y tratar de atravesar a pie la vasta extensión de traicionero hielo. Mientras tanto, una bestia infernal siembra el pánico entre los tripulantes, a los que va masacrando en terribles circunstancias. Habrá motines, canibalismo, aventuras y todo un abanico de ricos matices psicológicos que tendrán al lector buscando una manta para taparse, debido al realismo extremo con que Simmons describe la atmósfera. Los amantes de Lovecraft y Stephen King, así como los de Patrick O´Brian encontrarán en esta colosal novela muy gratas sorpresas.

lunes, 27 de mayo de 2013

Diez razones para ver Stark Trek, la serie original

Poco imaginaba Gene Rodenberry en aquellos lejanos años sesenta que su discretamente exitosa serie televisiva de ciencia-ficción se iba a convertir en el icono de la cultura popular que es hoy en día. De hecho, la serie fue cancelada después de tres temporadas por falta de audiencia. Tuvieron que pasar casi veinte años hasta que la gran pantalla puso de actualidad de nuevo la saga de culto, de la que su cada vez más notable legión de seguidores solo pudo disfrutar la serie de dibujos animados de los años setenta. Ya en los ochenta, una nueva saga de películas que la crítica destrozó sin compasión no hizo sino aumentar la leyenda, propiciando reposiciones de la serie original en todo el mundo. En España la conocimos como "La conquista del espacio". Ya en los noventa, una nueva generación tomó las riendas de la franquicia con bastante acierto, generando varios spin-offs, montañas de merchandising y, últimamente, unas más que dignas películas de elevado presupuesto de las que pronto veremos la siguiente entrega, que tiene muy pero que muy buena pinta. El planteamiento es simple, se trata de un futuro en que la humanidad ha alcanzado unos enormes avances tecnológicos y sociales, por lo que la naturaleza propia del hombre le lleva a explorar el espacio para satisfacer sus ansias de saber y expandir su cultura a otros mundos.

viernes, 24 de mayo de 2013

La ciencia-ficción de Stephen King

A finales de los años setenta y principios de los ochenta, un nuevo escritor irrumpió con fuerza en el mercado estadounidense con dos títulos que cosecharon muy buenas críticas y unas ventas considerables. El autor, Richard Bachman, reflejaba sus historias en un marco distópico al que sacaba mucho partido a la hora de contar sus historias de horror y violencia. Ente otras, destacan La larga marcha y El fugitivo. La primera narra la experiencia de un adolescente que participa en un concurso televisivo de resistencia. En él, los concursantes deberán competir entre ellos para alcanzar la meta caminando sin detenerse durante dos o tres días completos y el ganador obtendrá un importante premio en metálico. El análisis de las motivaciones de los jóvenes y las interacciones que se dan entre ellos a lo largo de la marcha darán juego para mucho. Es una novela que sumerge al lector en una atmósfera opresiva en la que cada participante se verá llevado hasta el límite y comprobará de lo que es capaz con tal de ganar el premio y sobrevivir. En El fugitivo, que fue adaptada horriblemente al cine en una infame aunque entretenida película protagonizada por Scwarzenegger en los ochenta, también se toma un concurso televisivo como marco para un thriller frenético. El concursante deberá huir de la policía y el ejército de ciudad en ciudad, al tiempo que la televisión despliega toda una campaña de difamación en su contra para conseguir la colaboración ciudadana en su captura. Nada que ver con el filme, que pasa por ser un blockbuster para recaudar taquilla a costa de un Scwarzenegger en la cresta de la ola y que fue destrozado hasta quedar irreconocible.

miércoles, 22 de mayo de 2013

"La hora del mar": Carlos Sisí se desmarca del género Z

Reconozco que no soy imparcial cuando escribo sobre Carlos Sisí, y es que siento debilidad por sus novelas. De todos modos, es mi deseo hacer un breve comentario sobre esta obra que fue publicada poco antes de su última novela, "Panteón", premio Minotauro 2013. Tal vez por ello," La hora del mar" pueda quedar en un segundo lugar en las estanterías de los lectores que tengan pendiente también la lectura de "Panteón" y prefieran empezar por ésta. El caso es que son dos historias bien diferentes y, dependiendo del género que queramos degustar, sería recomendable empezar por una o por la otra. La hora del mar es una novela de desastres naturales, supervivencia, ufología, weird menace y mucho más. Contiene un trasfondo ecologista y espiritual que la hace diferente al resto. La intriga política tiene lugar de una forma exquisita, llevada de la mano de unos personajes llenos de riqueza y caracterizados, como viene siendo costumbre del autor, con nombres rebuscados para ser retenidos en la "memoria RAM" del lector y distinguirlos entre sí desde el primer momento, un recurso que se agradece. La trama es rápida, ágil y atrapa el interés desde la primera página. Tiene todos los ingredientes de un best-seller, pero con un sabor autóctono que supera con mucho a laureadas obras anglosajonas y que Hollywood podría destrozar en una superproducción millonaria sin ningún tipo de complejos.

martes, 21 de mayo de 2013

John Carter de Marte, un héroe "a lo Burroughs"

Hubo un tiempo en que las publicaciones de ficción de todo tipo llegaban al público en un formato popular y asequible para todos los bolsillos. El ellas publicaban todo tipo de escritores, que habitualmente simultaneaban varios géneros a la vez. Edgar Rice Burroughs alcanzó la fama en los lejanos años 20 con su saga de historias de Tarzán, pero también con otras como la saga marciana de John Carter o la venusina de Carson Napier. Los héroes de Burroughs, del que John Carter es, quizá, el más claro arquetipo, se caracterizan por una inquebrantable rectitud moral, una cierta dosis de machismo infantil y toneladas de deliciosa mojigatería a la hora de seducir a una dama. Todas estas cualidades, empaquetadas en un individuo de valor singular y una audacia fuera de toda medida, componen la carta de viaje de todo héroe de la "era Pulp" que se precie. Resulta delicioso releer estas historias hoy en día, en las que se desborda la fantasía de Burroughs, con multitud de seres imposibles que pueblan un Marte plagado de vida. Yo, desde luego, haré lo posible para que mis hijos lean estas historias, que son para todos los públicos, cuando estén en la edad adecuada. Ya se sabe: Julio Verne, Burroughs, Wells. Espero que la "actualizada" versión de Disney no desvirtúe la verdadera esencia de John Carter. Al fin y al cabo, un héroe tiene que ser valeroso hasta la estupidez, torpe a la hora de relacionarse con el sexo femenino y bueno como el pan.

lunes, 20 de mayo de 2013

¿Quién no se acuerda del Hero Quest?


Este juego de mesa, que pretendía ser una versión simplificada del Dungeons and Dragons, hizo las delicias de los afortunados que lo tuvieron, o de los que tuvimos amigos que lo tenían. El bárbaro, el elfo, el mago y el enano. Se echa en falta algún personaje femenino, pero algún defecto tenía que tener. Un jugador hacía de Master, moviendo a los monstruos y colocando las puertas, tesoros y trampas. Incluso tenía una versión en el Amstrad y el PC. Todo un clásico para recordar.
http://www.youtube.com/watch?v=F2BXmQ-EwmI

jueves, 16 de mayo de 2013

Robert Silverberg, no solo un maestro de la ciencia-ficción

El genial escritor, toda una referencia en el mundo de la literatura de ciencia-ficción, logró la fama a mediados de los años sesenta y se consolidó como escritor estelar durante los setenta. Gran amigo de Isaac Asimov, se cuenta que cada vez que visitaba una biblioteca, hacía un recuento de los títulos escritos por él que había y los de Asimov. Luego llamaba al Buen Doctor para comunicarle el resultado, ganando siempre Asimov. El autor de obras maestras como "Retorno a Belzagor" o sus diversas antologías de relatos de ciencia-ficción, también hizo incursiones más que meritorias en el campo de la fantasía. La novela que nos ocupa, "El castillo de Lord Valentine", fue publicada en España por la editorial Acervo y por Ultramar en los años ochenta. El grueso volumen de más de 500 páginas original de dividió en dos para su edición en bolsillo, titulándose el segundo "El laberinto de Majipur". En total, cuatro títulos componen la llamada "saga de Majipur" en su edición española. En ella se narran las aventuras y desventuras del rey de un reino de fantasía al que han usurpado el trono y le han borrado la memoria. El legítimo monarca, lord Valentine, se unirá a una compañía ambulante de malabaristas que recorre el país buscando eventos en los que actuar.

miércoles, 8 de mayo de 2013

El legado de Lovecraft: Henry Kuttner

Hay editoriales que son diferentes al resto. La biblioteca del laberinto, S.L. es una de ellas. Acostumbrados a rescatar joyas olvidadas de la edad de oro de la literatura pulp, ofrecen un amplio abanico de títulos con una edición cuidada al detalle y a un precio razonable. Este volumen en particular me sorprendió muy gratamente, por la calidad de su contenido y por el regustillo a pulp que emana. La primera parte del mismo está constituida por una obra de viajes en el tiempo con profusión de ilustraciones de la época y con un fuerte sabor a serial radiofónico que resulta refrescante, como mínimo. A continuación se incluyen los relatos de horror cósmico que, en la línea de H.P. Lovecraft, diversos autores realizaron en respuesta a la demanda existente por aquellos lejanos años treinta.

martes, 7 de mayo de 2013

Zothique, el último continente. Por Clark A. Smith.

De todos los escritores del llamado "círculo de Lovecraft", Clark Ashton Smith es probablemente el más desconocido en nuestro país. Se trata de un autor polifacético (además de escribir ficción, traducía obras del francés, dibujaba y esculpía) y, a menudo incomprendido.

jueves, 2 de mayo de 2013

Panteón, premio Minotauro 2013. Otra vuelta de tuerca de Carlos Sisí.


Space opera de la buena que nos trae reminiscencias de la Fundación de Asimov mezclado con Warhammer 40 k y una buena dosis de terror lovecraftiano. Mezclar en una batidora y servir bien caliente, listo para disfrutar.
   Carlos Sisí ha sido, sin duda, uno de los grandes descubrimientos de lo que va de siglo en el panorama literario nacional.
Tras el rotundo éxito de la trilogía Los Caminantes, al más puro estilo de la serie de cómics y TV The Walking Dead, solo que mejor y ambientada en Málaga, la incógnita era qué sería capaz de ofrecer el autor en otros terrenos. La primera sorpresa fue La hora del mar, donde nos atrapa desde la primera página en un thriller apocalíptico con mucho sabor weird menace que hizo las delicias de este que escribe y muchos otros miles de lectores. El problema es que no se puede parar de leer desde que empieza la novela y eso es un incordio para los que todavía tenemos un trabajo y familia. Alguna pega tenía que tener.